Un ensayo como mejor reivindicación

Bajo el sugerente título de Los bajos fondos del corazón la editorial Tusquets acaba de publicar un ensayo sobre el género negro que lleva la firma de uno de los autores de su extenso catálogo: el cacereño Eugenio Fuentes. Creador del detective privado Ricardo Cupido, que ha protagonizado novelas como El interior del bosque, La sangre de los ángeles, Las manos del pianista, Cuerpo a cuerpo, Contrarreloj, Mistralia, Piedras negras y Perros mirando al cielo, Fuentes ya sabe lo que es adentrarse en el mundo del ensayo literario con el titulado La hoguera de los inocentes, que aborda magistralmente las diferentes formas que ha adoptado la intolerancia a lo largo de la historia de la humanidad.

Pero si hay un género literario capaz de ensimismarnos y regalarnos horas de placentera lectura, absortos en la resolución de algún enigma, en la persecución de un asesino o en la aclaración de un crimen más o menos sangriento, este es sin duda el género negro, la novela policiaca, también conocida como noir. Con la intención de desmontar los grandes tópicos que rodean a esta literatura, Eugenio Fuentes indaga en los orígenes históricos, sociales y literarios de un género que juega con la verdad y la mentira, con los problemas psicológicos de sus protagonistas o sus dificultades para relacionarse con el mundo y sus semejantes. Ejemplar cultivador él mismo de este género, Fuentes se acerca en esta obra a los grandes autores de novela negra —desde Edgar Allan Poe o Conan Doyle hasta Stieg Larsson— y explora personajes, tramas, emociones y toda la mitología propia del género. Un renovador y fascinante ensayo que reivindica el género negro como espejo de la condición humana.

“Defiendo que la novela negra está borrando los límites que la separaban de otros géneros en un permanente trasvase de temas y estilemas, y que ha dejado de ser un compartimento estanco”, ha llegado a comentar Fuentes.

En su magnífico ensayo podremos conocer más a fondo al gran Sherlock Holmes, a Poirot, Marlow, pero también la grandeza literaria de Patricia Highsmith o de Borges, deteniéndose por supuesto en esa eclosión de la novela negra nórdica que llegó de la mano de Mankell y que luego puso de moda en todo el mundo Stieg Larsson.

Eugenio Fuentes, sin grandes pretensiones académicas ni un exceso de divagaciones, recorre las aguas bravas del ensayo como si fuera una novela río que te va arrastrando sin que casi te des cuenta.

Una obra para conocer mejor un género al alza y que, cada día, confirma que no sólo es literatura sino que lo es de calidad. El libro tiene 384 páginas y su precio es de 21 euros.

La saga: Vuelve Petra Delicado, la pionera entre las investigadoras

Petra Delicado, la inspectora pionera de la novela negtra española, nacida de la pluma siempre ágil y salvaje de Alicia Giménez Barglett, está de vuelta. La editorial Destino acaba de publicar La mujer fugitiva, decimotercera entrega de la serie. Estamos ante un caso que se las trae y amenaza con convertirse en una mancha en su hoja de servicios. Y el ordinal de la serie no parece que sea una simple coincidencia, porque sin duda se trata del caso más endiablado y difícil al que se enfrenta la inspectora en toda su dilatada carrera. Todo ello sembrado de agudas reflexiones, una buena dosis de crítica social y el ritmo trepidante de una trama policial que nunca falla. Todos esos méritos que Alicia Giménez Bartlett suele desplegar en sus novelas y que sus fieles lectores bien conocen, regresan ahora incluso reforzados en esta nueva entrega, cuya inesperada vuelta de tuerca final solo arroja una certeza: no será la última.

Parece que Alicia Giménez Bartlett ha querido en esta ocasión poner a prueba las cualidades y capacidades de su personaje de ficción. Entre otras cosas, por la novedosa e insólita escena del crimen: una furgoneta gastronómica aparcada en una feria de Barcelona y rodeada de vehículos de similares características. Ese food truck, donde aparece el cadáver apuñalado del cocinero en su interior, es la reducida y escasa escena del crimen. Disfruten del regreso de Petra.

‘Deseos humanos’, Fritz Lang y Glenn Ford, en estado de gracia

La recomendación de nuestra filmoteca del crimen de este domingo es otra obra del maestro Fritz Lang, Deseos humanos. El film se rodó en 1954, en plena fiebre por el cine negro americano, y cuenta la historia de Carl Buckley (Broderick Crawford), un maquinista que está aterrado ante la posibilidad de perder su trabajo, pide a su mujer (papel interpretado por Gloria Grahame), con la que mantiene una fría relación, que interceda por él ante un ejecutivo de la compañía con la que ella había mantenido relaciones antes de casarse. Sin embargo, cuando Carl se entera del precio que su mujer ha tenido que pagar para evitar su despido, pierde la cabeza y asesina al directivo durante un viaje en tren. El ferroviario Jeff Warren (Glenn Ford) se enamora de la mujer de Carl, que le confiesa que su marido la está chantajeando. Una gran trama y una magnífica película del maestro Lang. Puede verse en Amazon y Filmin.